Las personas pueden ser referidas para ser atendidas por un nefrólogo por las siguientes condiciones:
Enfermedad renal crónica (también llamada insuficiencia renal crónica), de cualquier grado de evolución (existen 5): se caracteriza por una baja en el funcionamiento de los riñones de manera crónica y con múltiples consecuencias que deben ser atendidas por el especialista.
Insuficiencia renal aguda (habitualmente en personas hospitalizadas): se caracteriza por la pérdida aguda o abrupta de la función de los riñones, habitualmente secundaria a otras enfermedades como infecciones graves.
Hematuria (sangre en la orina): macroscópica (se ve a simple vista) o microscópica (solo se ve en un examen general de orina), es una condición que puede ser originada por diferentes enfermedades y debe aplicarse un algoritmo de diagnóstico.
Proteinuria (pérdida excesiva de proteínas en la orina): también es una condición cuyo origen se deriva de múltiples causas y que debe aplicarse un abordaje de diagnóstico para dar un tratamiento dirigido y oportuno.
Litiasis de la vía urinaria (piedras en los riñones): debe estudiarse la causa de estas y dirigir el tratamiento para tratar de evitar su formación a futuro.
Quistes renales (acúmulos de líquido en los riñones): pueden deberse a enfermedades hereditarias o adquiridas y cada cual tiene su manejo establecido.
Infecciones de la vía urinaria: infecciones que pueden ser en la vía urinaria baja como en la uretra o en la vejiga, o infecciones que pueden afectar a los riñones.
Hipertensión arterial sistémica: en especial de difícil control o de origen renal, ya que en algunos casos existen enfermedades que pueden provocar hipertensión y deben ser atendidas oportunamente.
Alteraciones del estado ácido base o de los electrolitos: problemas del sodio, potasio, calcio, fósforo, magnesio; problemas de acidosis excesiva en la sangre, entre otros.
Terapias de reemplazo renal (terapias dialíticas): inicio y seguimiento crónico de diálisis peritoneal y hemodiálisis; denotar la diferencia entre estas terapias y ayudar en la elección de estas dependiendo las condiciones de salud o el problema de origen de cada persona.
Glomerulonefritis, glomerulopatías, nefropatías: enfermedades que afectan la estructura básica de los riñones y que pueden tener origen primario en los mismos, o pueden originarse en otros sistemas y manifestarse en los riñones; tales como enfermedades autoinmunes (lupus) o enfermedades metabólicas (diabetes); es de especial interés el manejo especializado para evitar progresión de estas.
Síndrome nefrítico: problemas inflamatorios de los riñones de diverso origen que pueden ser agudos o crónicos.
Síndrome nefrótico: conjunto de síntomas secundarios a enfermedades que provocan pérdida excesiva de proteínas en la orina y que deben manejarse de manera especial con protocolo diagnóstico y terapéutico.
Trasplante renal: protocolo de estudio para la realización de un trasplante renal exitoso, realización del trasplante con un equipo multidisciplinario, seguimiento crónico del paciente trasplantado, tratamiento en caso de eventualidades o complicaciones del trasplante renal.